Los amigos y amables
seguidores de Cinema Genovés ya
conocen el escaso interés que presto al cine que se produce en estos últimos tiempos;
digamos, para concretar un poco, en las últimas décadas… No es nada personal
con respecto a los cineastas que intentan hoy vivir del oficio cinematográfico,
aunque sí sostengo que éste poco tiene que ver con el cine que yo amo: el cine
silente y el cine clásico. Como puede deducirse de lo que
acabo de afirmar —y por lo ya sabido de antes— tampoco se trata de una cuestión
de manía, afán de singularidad o simple antojo.
Pocos estrenos llaman mi atención, de los festivales del ramo ni me entero, y por no seguir, ni sigo ya la ceremonia de la entrega anual de los Oscar de Hollywood. Aun así, fíjense,
he tenido la osadía de aceptar colaborar en el volumen colectivo, coordinado
por Carlos Tejeda e Hilario J.
Rodríguez, Cine XXI. Directores y direcciones (Cátedra), actualmente en fase de
edición y cuya publicación por la editorial Cátedra está prevista para la
próxima primavera. Ya me dirán ustedes…
Puesto que uno es de
natural curioso y, después de todo, tiene interés por saber algo del cine (o
sucedáneo) que se hace en nuestros días, de
vez en cuando dedico alguna sesión cinematográfica a visionar películas del
presente —digámoslo así— en lugar de explorar y repasar las que habitualmente tengo presentes.... Para asegurarme este propósito de puesta al día visito algunos blogs amigos, más pendientes (y acaso también más pacientes)
que yo de la cartelera semanal, donde suelo encontrar información valiosa y
crítica cinematográfica de las últimas producciones. En ocasiones, también ojeo
(más que hojeo) alguna revista del ramo, pero ya no quedan muchas y las que hay
no llaman mucho mi atención ni mi curiosidad.
Si hay un director en
activo que me interese seguir su trabajo (aparte de David Mamet, Peter Weir o Sam
Mendes, por citar sólo tres nombres que me vienen ahora a la mente), es Michael Mann (Chicago, EE UU, 1943).
Uno de los films que ha dirigido, Heat (1995), lo considero de lo
mejor que he visionado del «cine actual», un título que no dudaría en incluir en el Top de mis películas favoritas y que más veces que revisitado;
siempre con sumo gusto. Encuentro ahí no sólo un cine de acción de primera
categoría, que incluye algunas escenas (como el robo del banco) que cabría
situar entre los momentos estelares de la cinematografía de todos los tiempos,
sino también gran inteligencia narrativa, mucho talento para crear imágenes y ambientes, así como una
dirección de actores verdaderamente de quitarse el sombrero; y ya saben ustedes
que yo uso esa prenda de vestir.
Procedente de la
televisión (sino y destino del «cine actual», al menos el norteamericano
realizado desde los años sesenta), Mann dirigió durante los años ochenta la
célebre serie Miami Vice, la cual, por cierto, no he tenido el gusto de
seguir, y que ahora, con afán retrospectivo o reivindicativo, no me apetece, francamente, ponerme a la labor.
Su primer largometraje es de 1981: Ladrón (Thief), que cuenta al frente del reparto con ese grandísimo actor que es James Caan, el de las anchas espaldas. Mucho de Heat ya se vislumbra en esta interesante cinta, la cual, vista hoy, podría interpretarse casi como un apunte de aquélla.
Posteriormente, realizó un bodrio sin paliativos, El torreón (The Keep, 1983), una producción que bascula
—penosamente— entre lo fantástico y el terror, pero que a mí me aburrió
soberanamente. Manhunter (1986) y Ali (2001) no las considero relevantes. Aparte de esto, y de lo que he podido llevarme a los ojos y
oídos del resto de su producción, me han atraído bastante El último mohicano (The Last of Mohicans, 1992);
aunque prefiero, claro, la versión muda que hizo Clarence Brown —en
colaboración con Maurice Tourneur— de este clásico de la literatura en 1920), El
dilema (The Insider, 1999), Collateral
(2004) y Enemigos públicos (Public
Enemies, 2009), además de la ya mencionada, Heat, mi trabajo preferido del director americano.
Su primer largometraje es de 1981: Ladrón (Thief), que cuenta al frente del reparto con ese grandísimo actor que es James Caan, el de las anchas espaldas. Mucho de Heat ya se vislumbra en esta interesante cinta, la cual, vista hoy, podría interpretarse casi como un apunte de aquélla.
El último mohicano (The Last of Mohicans, 1992) |
El dilema (The Insider, 1999) |
Collateral (2004) |
Enemigos públicos (Public Enemies, 2009) |
Seguiré, pues, la
pista a la sugestiva trayectoria cinematográfica de este cineasta, poseedor de
una extraordinaria capacidad visual y un notable vigor narrativo, amén de completar el visionado
de los títulos que todavía me falta conocer de su obra. Especialmente, tendré
en cuenta aquellos que ustedes tengan a bien recomendarme.
Pues no dejas mucho margen, amigo Fernando, a la hora de proporcionar otros título pues Mann no tiene, como director, una filmografía muy extensa.
ResponderEliminarRecuerdo haber visto "Heat" en el cine y la tengo en buena estima (al menos ha quedado así en mi memoria) pero creo que no he vuelto a verla.
Yo confieso: ¡qué ganas de leer "El origen del siglo XXI"!
Salucines
¿No te apetece leer, amigo deWitt, lo que he escrito en el Diccionario sobre, entre otros cineastas, Steven Spielberg y... Oliver Stone? Pues yo sí...
EliminarSalucines
Pues sí, sobre todo Spielberg, que sé que no siempre lo tienes "en buena estima" ;-)
EliminarCierto, cierto. Aunque tampoco Stone es un santo de mi devoción... De ahí el desafío. Aunque siempre con la elegancia por delante.
EliminarSalucines
El año pasado produjo y dirigió el episodio piloto de una serie ambientada en el mundo de las carreras de caballos titulada "Luck", búscala por la red porque es una serie muy meritoria.
ResponderEliminarSaludos
Si, cierto, Alforte, había olvidado el dato. Dicen que la memoria es selectiva. Lo cierto es que vi el episodio y ahí dejé de seguir la serie. Escribí en el blog una entrada sobre el tema
EliminarSalucines
http://cinemagenoves.blogspot.com.es/2012/03/luck-2012-una-serie-con-mala-pata.html
Pues no he visto "Heat" (apuntada queda), aunque soy una gran fan de "El dilema". A Crowe no le cayó el óscar ese año (se lo arrebató Kevin Spacey, que estaba bajo las órdenes de Mendes en "American Beauty") y la academia intentó enmendar la cosa al año siguiente aprovechando "Gladiator". Pero creo que Crowe nunca ha estado mejor que en esa ocasión.
ResponderEliminarEn fin, seguiremos a Mann de cerca. Y al nuevo volumen también, claro ;)
Un saludo
Si te gusta el cine de acción, Mara, no puedes perderte "Heat". Por lo demás, también a mí me gustó la interpretación de Crowe en "The Insider". Desde luego, mucho más que en "Gladiator"...
EliminarYa os iré contando más cosas sobre el Diccionario porque es algo muy especial y fuera de lo corriente. Ya veréis...
Salucines
Titulos y peliculas muy interesantes. Resaltando The Insider sobre todas ellas, seguida por Collateral.
ResponderEliminarPublic Enemies que ví en el cine y me gustó al volverla a ver se me cayó un poco. En su lugar he visto un documental sobre John Dillinger muy interesante en el que sin duda se basó el guión de la pelicula.
Saludos
Para mi gusto, abril, el problema de "Public Enemies" está en el reparto: Johnny Depp y Christian Bale son demasiado "blanditos" para un film de este género. En ese sentido, prefiero mil veces antes el "Dillinger" que hizo John Milius, con dos actores de carácter: Warren Oates y Ben Johnson.
EliminarSalucines
Me lo temía: por dos veces he dejado comentarios por aquí, Fernando, antes de ahora, que espero quede grabado. He tenido serios problemas para dejar incluso comentarios en mi bloc, pero al tuyo además me ha costado entrar. Parece que blogger le ha dado por hacerme la puñeta.
ResponderEliminarEn fin: ya te he dicho (estará en algún limbo) que Michael Mann no es precisamente uno de mis favoritos de estos últimos años, aunque coincido contigo en que la escena del banco está bien rodada (a pesar que ese final andariego me choca todavía bastante) y que su versión de El último mohicano me gustó bastante, aunque me parece que el montruo de los oscar (se llevará el de mejor actor el año que viene: seguro) ayuda bastante: del resto, no estoy muy convencido y me parece curioso -e inexplicable, de momento- que a tí te guste tanto, aspecto que ya conocía de comentarios tuyos anteriores.
Un abrazo.
p.d.: este me parece que se queda porque han aparecido debajo mi nombre y también lo de suscripción por correo electrónico que antes no aparecían ni en broma.... uff.... (lo he remitido dos veces en diez minutos)
Hummm... No me asustes, Josep, con el Blogger feroz porque ya me ha dado bastantes problemas en otras ocasiones. He repasado los comentarios en "el limbo" y no hay ninguno tuyo. Sólo spam y espantapájaros...
EliminarEn fin, me alegra comprobar que, finalmente, este comentario tuyo, como gritaba aquel famoso y antañón comentarista de los partidos de tenis: ¡Entró! ¡Entró...!
Salucines
A mi me contenta y descontenta a partes iguales, me gustan mucho títulos que apuntas como Heat o Enemigo Público, pero otras me parecen soporiferas, por muy dinámica que sea su cámara. Me apunto lo del libro del sr. Tejeda. ¿Por cierto cuando es el parto de H. Revelado? He estado vagando por ahí estos días y no estoy puesto con las novedades.
ResponderEliminarSaludos
Roy
Razón lleva, amigo Roy, pues no puede uno complacerse del todo con los cineastas de nuestros días. Pero eso es lo que hay. Mas no se desanime porque la próxima semana volvemos al cine clásico...
EliminarEn cuanto a los libros en danza, no me extrañaría que saliese antes el del sr. Tejeda que el que comanda un servidor. Los autores de "Hollywood revelado" estamos tan a la espera como usted. Toca mover ficha a la editorial. Ya veremos...
Salucines